soy yo la mala. No puedo evitarlo, en momentos como este, me desquicio de mala manera. Ahora mismo me sabe mal hasta escribir aquí, pero o me desahogo, o reviento. Hace poco me quejaba de que es muy, pero que muy dificil, vivir en un hogar en el que dos personas no se hablan desde hace años, pero últimamente comienzo a comprender a una de las dos partes. No puedo soportar la disriminación, solo por ser la niña de la casa. Tonterías del día a día, como el no ponerme vaso al mediodía (bajo la premisa "pero si tú nunca lo usas") o el que cierta persona le haga la cama a mi hermano y a mí no, termina quemando de mala manera. Siempre me había parecido raro, pero es que día a día se hace más patente el favoritismo que existe en mi casa... y llamadlo envidia o llamadlo como queráis, pero empiezo a no ser capaz de soportarlo.
¿Y por qué digo que soy la mala? Porque cada vez que me quejo de la situación, me saltan con que yo estoy muy borde, que estoy muy chinche y similares... Vale, yo siempre digo lo mismo, que no deja de ser un mecanismo de autodefensa para que no me avasallen, para que SEA QUIEN SEA no se cuele, es una manera de decir, "Hasta aquí hemos llegado"... pero qué va, no se puede compartir mi punto de vista. Sé perfectamente que debe ser un punto de vista equivocado cuando absolutamente nadie más lo ve así, pero bueno.
Diría que me he quedado a gusto, pero esto de no poner nombres... ufff, me he quedado mejor, pero no tanto como debiera.
¡¡Hasta otra!!
